Las artes marciales son una práctica antigua originaria de Asia, creadas para la autodefensa. Hoy en día, son populares para desarrollar fuerza física y mental. Hay diferentes tipos, como karate y taekwondo, que se enfocan en golpear y bloquear, y judo y jiu-jitsu, que se centran en la lucha y la sumisión. Todas utilizan movimientos repetitivos y enfatizan la conexión mente-cuerpo.
Hay diferentes tipos de artes
marciales. Algunas, como el karate y el taekwondo se centran en golpear y
bloquear. Otras, como el judo y el jiu-jitsu se enfocan en la lucha y en
someter al adversario. Todas usan movimientos deliberados y repetitivos y
enfatizan la conexión entre mente y cuerpo. Muchas familias dicen que las artes
marciales ayudan a mejorar el autocontrol y la atención de sus hijos, algunos
estudios lo respaldan.
Las artes marciales, originarias
de Asia, son una práctica antigua que se desarrolló inicialmente para la
autodefensa. En la actualidad, numerosas personas practican las artes marciales
con el fin de fortalecer tanto su cuerpo como su mente.
Los beneficios de las artes
marciales para los niños
Existen muchas razones por las
que las artes marciales pueden beneficiar a los niños que piensan y aprenden de
manera diferente. Estos son ocho beneficios:
1. Se
enfocan en el crecimiento individual, no en la competencia en equipo.
2. Se
dirigen a objetivos concretos.
3. Las
rutinas se dividen en partes manejables.
4. Se
enfocan en el autocontrol y la concentración
5. Ayudan
con la coordinación.
6. Aportan
estructura.
7. Ofrecen
una manera segura de liberar el exceso de energía.
8. El
ambiente es de aceptación.